Anabel es la gerente de la academia Cartafol y el confinamiento le hizo ver que «necesitaba aires nuevos, alientos nuevos». Se puso manos a la obra y ya cuenta con nuevas instalaciones y novedosas propuestas
Con casi ocho años recorridos, Cartafol nació como un emprendimiento de dos mujeres. A día de hoy, Anabel Pardiñas Lema es la única gerente de la firma que es socio miembro de ACSIL, Asociación de Comercio, Servicios e Industria de A Laracha. Conversamos con ella para saber qué servicios ofrece la academia tras la pandemia y cómo plantea su labor en tiempos de coronavirus. Clases de apoyo académico, informática, inglés, música y apoyo emocional, son la clave de su éxito.
Por un lado, un grupo de profesores especializados en distintas áreas de ciencias y letras, trabajan en clases particulares para primaria, ESO y Bachillerato. También preparan ESA, competencias clave, clases de contabilidad, FOL y accesos a ciclos medios y superiores.
Pero eso no es todo. “También contamos con clases de informática para niños y adultos, que pueden ser en grupo o personalizadas. De un tiempo a esta parte muchas personas mayores acuden con su ordenador para empezar de cero y así poder llegar a usar Skype para hablar con sus hijos que están fuera de Galicia. O traen su móvil, para aprender a enviar whatssaps”, explica Anabel. Asimismo, agrega: “Hoy en día hay mucha necesidad de usar la tecnología y nosotros los ayudamos en lo que necesiten. Si no tienen ordenadores contamos con 5 portátiles y 5 ordenadores de sobremesa para uso de los clientes”. Tan importantes son las redes sociales que próximamente impartirán un curso sobre estas nuevas herramientas dirigido exclusivamente a empresas.
Sin duda una amplia variedad de propuestas…
Si, porque personalizamos la clase según cada cliente. Nos adaptamos a sus necesidades. También ofrecemos clases de mecanografía porque cada día es más útil para los tiempos que se avecinan. En dos a tres meses, dependiendo del alumno, garantizamos el uso del teclado con todos los dedos. Tenemos clases de idioma inglés para niños con la metodología de aprender jugando. Y siguiendo en la línea de los peques, el año pasado empezamos clases de música con bebés, colaborando con “Música vivencial» de A Coruña y fue todo un éxito. Este año seguiremos con esta actividad tanto para bebés como para grupos a partir de 4 años.
¿Qué circunstancia a nivel profesional y personal fueron más difíciles al aparecer el temido covid-19?
A nivel profesional fue duro tener que cerrar la puerta de un día para otro y con toda la incertidumbre que eso conllevó. Tomar la decisión de mandar los empleados a un ERTE, pensar en todo lo que había que pagar y que no había ingresos, reducir al máximo los gastos…fueron muchas horas de teléfono y de no dormir. Pensar en los alumnos y alumnas y ver como poder ayudarlos ante esa situación. Lo profesional y lo personal estaba todo muy relacionado. Llegó un momento en el que o volvía a trabajar o enloquecería.
¿Cómo resurgió vuestro sector tras la pandemia? ¿Qué pueden hacer y qué no teniendo en cuenta posible rebrotes?
La recuperación del sector va lenta. Aún hay cuestiones que están en el aire. Y vistas las noticias de los últimos días, la gente aún no está del todo convencida para estar en lugares con más gente.
¿Pudieron trabajar online durante el confinamiento? ¿Cómo lo han hecho?
En la zona donde yo vivo casi no tengo cobertura. Así que cuando los alumnos me preguntaban alguna duda, yo hacía un vídeo en whatssap explicándole y después no te cuento las aventuras para que el vídeo salga. Intenté usar la aplicación Zoom, pero era muy complicado por la poca cobertura. No obstante, estoy ahora en un programa con la Fundación Roncel, en la que un mentor me está poniendo al día en temas de clases online. Pronto Cartafol estará digitalizada y modernizada en temas de competencias digitales. Ese es uno de mis principales objetivos para Cartafol.
Sin dudas todo ello sirvió para dar un giro…
Todo esto hizo que le diera una vuelta al planteamiento de la academia. Necesitaba aires nuevos, alientos nuevos. Y así lo hice. El primero fue buscar una nueva ubicación. Ahora estamos en la Avda. de Caión 12, en un local que cuenta con 140 m2. Todas las aulas son exteriores, con ventanales para la ventilación y con una luz natural que enamora a quien entra allí. Aún le estamos dando los últimos retoques, es muy acogedora. Y ahora, toca la parte comercial. Estoy buscando ofrecer nuevas actividades, nuevas propuestas para que los ciudadanos de A Laracha no tengan que desplazarse a otras localidades y que puedan encontrar aquí, cerca, lo que buscan.
Una emprendedora incansable como tú, seguro que quiere ir más allá. Cuéntamos…
Bueno, sí…como otra novedad, decir que en la academia tengo a mi perra Golden “Koura” que tiene 1 año y 4 meses y que llevo entrenando desde los cinco meses para poder estar con niños. Me acompañará a trabajar y podrá interactuar con ellos. Que puedan acariciarla y disfrutar de su compañía. Y a nivel profesional tendremos a una experta en intervenciones asistidas con perros. Es una gran profesional, se llama Lucía Lombardía de la escuela de educación y entrenamiento Candamin. Colaborará con la academia para tratar precisamente con estos animales, posibles problemas que puedan plantear los niños. Una de las primeras actividades que haremos serán talleres de lectura con perros.
Iniciativas que estimulan los sentidos además de los conocimientos…
Exacto. Por ello, Cartafol continua colaborando con Neuromotiva, un centro de formación y estimulación mental. Con la novedad que ahora también prestarán sus servicios en Cartafol. Bajo cita previa, los interesados podrán ser atendidos por Mar Sánchez, psicóloga, quien también ayudará a los niños con técnicas de estudio personalizadas. Nos gustaría formar un grupo de ábaco, que es un método que mejora la concentración, la atención y la memoria. Y por las mañanas estamos organizando un Neuromotiva Adultos. Se trata de un programa de activación mental para personas mayores. En una línea similar, decir que empezamos un laboratorio gráfico de ilustración. Yo creo que la gente necesita hacer cosas nuevas. Necesita distraerse y expresar sus sentimientos de alguna manera, y una forma puede ser dibujando. Las clases las imparte Mon Lendoiro del Estudio Garabato Obradoiro de expresión Plástica.
Para mayor información sobre las actividades pinchar en este enlace